Euro Lobo / CNP 12.112
(MERIDA/ESPECIAL) Luego
de 5 días de manifestaciones por la inseguridad en la ciudad de Mérida, el
clima se volvió muy violento éste martes cuando motorizados armados, vestidos de
rojo y encapuchados, decidieron intervenir y obligar a los vecinos a cesar en
su protesta a punta de bala, situación que dejó por lo menos 5 personas heridas
de bala y una cifra importante en daños materiales.
La protesta la inició la sociedad civil y los estudiantes
universitarios el pasado viernes, reclamando mayor atención en materia de
seguridad al gobierno nacional y regional, estos focos de manifestaciones
pacíficas fueron deshechos por la policía del estado, empleando gases,
perdigones e incluso una vehículo de control de orden público del tipo ballena
que en la entidad se conoce como “La Grilla”
El mismo viernes un funcionario policial propinó un disparo
a quema ropa a un estudiante universitario que se encontraba manifestando en
las Residencias Cardenal Quintero situada al oeste de la ciudad, ocasionándole
una herida contundente en el tórax, lo que obligo a que los médicos del IHULA
le intervinieran de emergencia, logrando estabilizarlo y sacarlo del peligro.
Sin dilaciones y vista la presión del movimiento estudiantil
y de la sociedad civil, la Dirección de policía regional puso a la orden del
ministerio público a este uniformado quien fue presentado ante los tribunales
de justicia bajo el cargo de abuso de autoridad e intento frustrado de asesinato
culposo.
El fin de semana transcurrió con manifestaciones que fueron
disueltas con violencia por los cuerpos de seguridad, las detenciones ilegales
fueron patentes, pero los jóvenes liberados a las pocas horas.
El pasado lunes los estudiantes insistieron en su
manifestación, las protestas y los enfrentamientos con la policía fueron más
contundentes y en las noches los cacerolazos y la tranca de avenidas colapso la
ciudad.
El gobernador del estado Alexis Ramírez se limitó a acusar a
la “extrema derecha fascista y radical” de fomentar los desórdenes, instruyendo
a la policía a actuar con contundencia y señalando al consejero estudiantil
universitario Vilca Fernández, como el principal promotor de los hechos,
exigiendo su captura de inmediato, aseveración que molestó a los estudiantes y
a la sociedad civil quienes rechazaron tal afirmación.
Éste martes la ciudad amaneció llena de basura por la quema
de cauchos y basura de la noche anterior, pero con una calma que permitió a los
merideños volver a sus puestos de trabajo.
En horas del mediodía un grupo importante de motorizados,
vestidos de rojo, encapuchados y armados, se concentraron en las puertas de las
Residencias Domingo Salazar, otrora estudiantiles y ahora sede de los
colectivos pro gobierno, con la intención de organizarse para poner fin a las
manifestaciones de éstos días.
Entre tanto estudiantes de la facultad de medicina
decidieron salir a la Avenida Don Tulio al este de la ciudad, e iniciar una
manifestación pacífica con carteles alusivos a la inseguridad y exigiendo la
puesta en libertad de los estudiantes detenidos en Táchira. Esto alertó a los
motorizados que raudos acudieron a disolver la manifestación, en esta
oportunidad con el agregado que lo hicieron a punta de pistola mientras los
cuerpos policiales se retiraban del sitio, permitiéndoles actuar con total
impunidad.
La sociedad civil rechazó la acción de los motorizados y en
las Residencias Cardenal Quintero volvieron a tomar la calle, situación que
incomodó a los motorizados que de inmediato acudieron a poner fin a la
manifestación, disolviéndola a punta de pistola, allí resultaron heridos de
gravedad dos universitarios que fueron trasladados de emergencia al IHULA.
En la parte sur, Avenida Las Américas, pasos arriba del
Terminal de Pasajeros, los vecinos salieron y trancaron la importante vía, por
lo que los motorizados reaccionaron y les atacaron ante la pasividad de la
policía.
Entraron por la fuerza en las Residencias Rio Arriba, allí
los vándalos destrozaron por lo menos una veintena de vehículos e hirieron a un
menor de edad y a una dama, quienes fueron atendidos en clínicas privadas.
La universidad suspendió parcialmente sus actividades, el
sindicato de transporte paralizo el servicio público a media máquina y el
gobierno regional retomo el llamado a la calma sin que la policía actuara.
Para este miércoles se espera la realización de una marcha
multitudinaria convocada por los estudiantes y por la sociedad civil, por ello
en la ciudad se recibió el apoyo de por lo menos 90 Guardias Nacionales que
aterrizaron en el aeropuerto internacional Juan Pablo Pérez Alfonzo de El Vigía
y que custodiaran las avenidas y los edificios de la urbe, con la esperanza de
que impidan lo que la policía no pudo hacer este martes, controlar a los
violentos grupos de motorizados.
(Fotos red social
twitter)