sábado, 23 de febrero de 2019

Tricolor nacional llenó las calles de Mérida exigiendo la entrada de la Ayuda Humanitaria


La nueva Venezuela está naciendo
  
*** La bandera nacional se reflejó en las caras, la ropa, las prendas de los merideños que con alegría asumen que estar en las calles es la forma de construir una nueva época política en el país

Euro Lobo / CNP: 12.112

(Mérida).- Este sábado 23 de febrero mientras en las diferentes fronteras de Venezuela se luchaba para lograr que la ayuda humanitaria entrara al país a través de un corredor humano de asistencia, los merideños se congregaron desde muy temprano en distintos puntos con la intención de marchar, con una particular algarabía, hasta el Viaducto Campo Elías, lugar donde se encontraron para exigir la entrada del Auxilio Humanitario.



Aunque muchos pensaron que las concentraciones serían más madrugadoras, los ciudadanos no tardaron en darse cita en cada uno de los puntos señalados, en diferentes lugares se fueron agrupando, el tricolor nacional copó todas las calles, las caras pintadas, la ropa, las gorras, los brazaletes, la Bandera como prenda, alardeando de estos tres tonos que dan sentido a la libertad de Venezuela.



En el viaducto, los grupos de auxilio médico ya habían desplegado un amplio operativo de asistencia, eso brindó seguridad a los asistentes que se congregaron en la esquina de la Avenida Don Tulio con Av. 26, Campo Elías, allí se instaló la tarima, que como siempre fue insuficiente a pesar de no contar con escaleras.



En esta oportunidad los oradores escogidos por el Frente Amplio fueron más conmovedores que los encuentros anteriores, mucha más preparación y mucho más sentimiento dieron vida a un largo momento que a pesar del sol inclemente del medio día, permitió animar a los asistentes.



Hablaron representantes de los movimientos estudiantiles, de los profesores universitarios, de los médicos, las mujeres fueron protagonistas, todos hablaron de libertad, todos lo hicieron con sana alegría, todos hablaron de encuentro y coincidieron en reconocer que Venezuela es otra, que la democracia se está construyendo, que 20 años ya se acabaron.

Con la alegría de caminar con la verdad

Bajo el picante sol del medio día merideño, el Obispo Auxiliar de la arquidiócesis de Mérida, Monseñor Luis Enrique Rojas se dirigió a los centenares de merideños reunidos en el viaducto Campo Elías y  gritando “que viva Venezuela libre”, anunció que “la ayuda está entrando” pero rechazó la violencia que un grupo de venezolanos ha desatado contra quienes intentan ayudar a abrir el corredor humanitario



“Puede más la pasión, el amor a Dios, al pueblo, a la patria, que la fuerza de los sin razón”, abogo el Obispo, que para finalizar pidió rezar unidos de manos el Padre Nuestro y para bendecir a los asistentes, les sugirió un ola humana que fue épica y alegre.



Sacerdotes, y religiosas, seminaristas y laicos también acompañaron la concentración, ver monjas con la bandera contrastando con su hábito alegró a los asistentes y les llenó de una especial fuerza de fe.

Que vivan los jóvenes

El discurso final lo pronunció el ex rector de la Ula  José Mendoza Angulo quien felicitó a los jóvenes que “se han echado a Venezuela al hombro”.



Recordó que hace 61 años dirigió su primer discurso frente al rectorado, un discurso que conmemoró la caída de una dictadura y explicó que, se sentía feliz de estar haciéndolo nuevamente en esta fecha, la cual “para Venezuela marca el inicio de una nueva etapa de democracia”.



Al finalizar su arenga, atendiendo a lo señalado por el Presidente Juan Guaidó, invitó a los asistentes a marchar hasta el sector Glorias Patrias, lugar hasta donde se dirigió la concurrencia en paz, alegría y emoción democrática, para instalarse frente al cuartel de policía y la guarnición local, exigiendo a los uniformados que se coloquen al lado correcto de la historia.

Para que no se olviden

Al culminar las arengas programadas y antes que el pueblo se retirase, en la tarima subió el ex alcalde Carlos García, a quien ningún dirigente hizo mención con antelación, a quien han intentado borrar de la memoria histórica merideña, a pesar de que fuese destituido por el ilegal TSJ, perseguido por los órganos de seguridad y obligado al exilio.



Sus palabras fueron de esperanza, los asistentes aplaudieron al joven que con prontitud desapareció del lugar dejando un sabor de cambio en la colectividad que cerró así una fecha que se escribe en el libro de la historia democrática del país. (23/02/2019).-






No hay comentarios:

Publicar un comentario