Aniversario
de los Cursillos de Cristiandad
*** Dios
sigue presente con su palabra hablando a cada uno de los que eligieron
responder a su llamado llenando su vida de colores, afirmó monseñor Rojas Ruiz
en su homilia
Euro Lobo SSCC / CNP: 12.112
(Mérida / Especial).- Al celebrar los 60 años de
fundado del Movimiento de Cursillos de Cristiandad en Venezuela, se realizó simultáneamente
un encuentro de sus miembros el cual se conoce como “Ultreya” Nacional, en
Mérida, los espacios del Colegio Fátima, fueron los ocupados por los
cursillistas que culminaron su reunión con una eucaristía presidida por el
Obispo Auxiliar de Mérida Monseñor Luis Enrique Rojas Ruiz.
En su homilía
el prelado invitó a los asistentes a que salieran de allí siendo testigos del
evangelio, “testigos del amor de Dios”, en lo que calificó como una “hora dura
para Venezuela”.
“El dolor
de nuestro pueblo nos toca de cerca, a nivel personal, de familia, porque nadie
se escapa de esta escabrosa realidad” manifestó cuando reflexionó sobre la
gracia que la palabra de Dios regalaba para esa celebración.
Dios nunca nos va a desamparar
Reflexionó
sobre la importancia que le dan los hombres a las cosas materiales y pasajeras
de la vida, que son importantes pero que no llenan ni plenifican una vida tanto
como el amor de la Palabra de Dios, “que Él nos regala y nos enseña que jamás nos
abandona, ni aún en los momentos más difíciles de nuestras vidas”.
Les recordó
a los asistentes, que su sola presencia en el lugar del encuentro, representaba
“un éxito del Señor”, porque los que llegaron vencieron obstáculos diciéndole al
Señor “presente”, también en nombre de los que no pudieron llegar.
En sus
palabras fue enfático al recalcar que “Nuestra Iglesia no se detendrá en los
momentos de dificultad”, por eso llamó a los asistentes, para que reconocieran
que el hecho de estar allí les daba testimonio de que son verdaderos testigos
del Amor de Dios.
El mal intenta poner fin a la Buena Obra de
Dios
En su
meditación, el pastor recordó como en estos tiempos de dificultad, muchos
grupos apostólicos y movimientos dentro de la iglesia Católica venezolana, se
han extinguido, bien sea por cansancio o por que sus miembros han emigrado, abandonando
a su familias y sus raíces.
Sin embargo
les hizo ver, que Los Cursillos de Cristiandad se han mantenido fieles a su
apostolado, a su compromiso, a su forma de responder llenando de colores su
vida.
No es el momento para desanimarnos
Este mensaje,
que monseñor ha repetido constantemente, y que invita a no dejarse vencer por la
tristeza y el desanimo, fue punto resaltante dentro de su meditación con los
cursillistas, “porque Cristo cuenta contigo, conmigo, con todos los que quieran
seguir formando parte de este gran Movimiento”.
Al referir
que los cursillistas han aprendido a “vivir la vida de colores”, puntualizo que
no lo pueden hacer si no se mantienen en Gracia de Dios, lo que pueden lograr
participando en la eucaristía, escuchando la palabra de Dios, siempre contando
con la compañía de María.
“A Cristo
es imposible conocerle y no seguirle, seguirle y no amarle”, aseguró Monseñor
al hacer referencia al compromiso que cada uno de los presentes hizo luego de
realizar el fin de semana del cursillo.
Finalizó
exhortando a los allí reunidos a seguir con constancia en ese camino que eligieron
para responder a Dios, “así vamos bien”, espetó al hacer referencia que al
finalizar el camino que los peregrinos hacen a Santiago de Compostela, se
despiden con la frase “buen camino”.